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Los cubrezapatillas para ciclismo para verano son un accesorio perfecto para esos primeros días estivales que a primera hora aún hace fresco o para cuando realizamos rutas por alta montaña donde las temperaturas no siempre son altas. Su sencillez y su facilidad de guardarlos en el maillot sin que apenas ocupen espacio los hacen muy atractivos sobre todo para aquellos ciclistas de pies algo fríos.
Los mejores cubrezapatillas de verano
Cubrebotas Spiuk XP Ligh
Ligeros y fáciles de guardar. Ideales para temperaturas entre 10 y 15 ºC
Cubrebotas Velotoze impermeables
Ligeros y fáciles de guardar. Para mtb y carretera.
La importancia de los cubre botas de verano
No soy muy amigo de esos accesorios tipo calcetín que hacen las veces de un cubrebotas, pero si que es cierto que me llamo una vez la atención en una salida con la grupeta uno de los compañeros que llevaba unos caldetines a modo de cubrezapatillas y me di cuenta que no sólo pueden servir cómo prenda de abrigo, sino también para cuidar un poco los zapatos de bici. Casualmente tuvo un percande con la cadena y el calcetín.
Más tarde ya empecé a ver cubrezapatillas mas finos a la venta en numerosos comercios, seguramente varias marcas de ropa habían caído en la cuenta de que las temperaturas que manejamos los ciclistas no son tan evidentes como frío en invierno y calor en verano y que los cicloturistas no llevamos coche de apoyo para poder ir desprendiéndonos de prendas durante la salida. Las rutas son tan diversas y llegamos a lugares tan impensables que en muchas ocasiones podemos pasar calor y frío el mismo día y en cuestión de minutos.
Tipo de cubrezapatillas de verano
Algunos cubrebotas pueden servir únicamente para cuidar un poco mejor nuestro calzado, esto evita que se manchen o que se rocen cada vez que nos tenemos que enganchar la cala. ¿Te has fijado de que siempre se te empieza a desgastar antes una puntera de la zapatilla que la otra? Pues adivina por qué…
Pero otros cibrezapaillas finos también tienen membranas para el viento e incluso pueden ser impermeables sin llegar a ser para invierno. Si te decantas por los primeros, cualquiera te puede servir. Pero si tu idea es otra y necesitas algo de protección ten en cuenta que no te va a servir cualquiera.
Cubrezapatilla de verano con membrana
Aunque el termino membrana te suene raro, es una palabra que se utiliza mucho para definir los tipos de ropa técnica que existen en el mercado. Esto se utiliza mucho en otros deportes como montañismo, pero desde hace años las membranas se utilizan en las prendas de ciclismo donde juegan un papel muy importante a la hora de confeccionar ropa de gran calidad.
Se denomina membrana a aquella “tecnología” que dota de una serie de cualidades a la ropa. Las más conocidas son las membranas cortavientos, como podría ser el WindSttoper® y las membranas impermeables como el GoreTex®. Estás últimas además van acompañadas de un termino denominado columna de agua. Esta es una unidad de medida que se utiliza para determinar la capacidad de impermeabilidad que tiene un tejido y es tremendamente útil a la hora de elegir ropa. La medida viene dada tras una prueba en la que el resultado es directamente proporcional a su capacidad de impermeabilidad. Es decir, a mayor número mayor capacidad.
Cubrezapatillas Spiuk XP Light
Esto es un claro ejemplo de cubrebotas minima expresión. No disponen de ningún tipo de membrana y son fáciles de guardar. Sirven para eliminar ese primer golpe de aire a los pies, ideales para temperaturas entre 10 y 15 grados. También para mañanas de verano frías. Y sobre todo para conservar bien las zapatillas de ciclismo.
Cubrezapatillas Spiuk XP Light
Muy finos e ideales para primavera cuando la lluvia puede aparecer en el peor momento, los cubrezapatillas Velotoze son ideales para MTB pero se pueden adaptar perfectamente a las zapatillas de carretera. Disponen de una membrana impermeables de unos 10.000 mm de columna de agua.
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Sobre este artículo
Los pies “al punto” por favor. De tener los pies fríos a tenerlos calentitos hay un mundo de comodidad de diferencia. No hay nada más desagradable que empezar la jornada con los pies fríos, por mucho que más tarde pegue el sol esas primeras mañanas veraniegas o los atardeceres primaverales pueden hacer que disfrutemos o no de nuestra pasión.